Herpes zóster y tu sistema nervioso: la conexión explicada

Herpes zóster y tu sistema nervioso: la conexión explicada
22 octubre 2025 1 Comentarios Braulio Aguirre

Calculadora de riesgo de neuralgia postherpética

Evalúa tu riesgo de neuralgia postherpética

Este cálculo estima tu probabilidad de desarrollar neuralgia postherpética (dolor persistente) después de un episodio de herpes zóster. Según estudios, el riesgo depende de factores como la edad, condiciones médicas y tratamiento.

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¿Sabías que el “dolor que arde” del herpes zóster no es solo una molestia cutánea? La razón está en lo que ocurre bajo la piel: una batalla entre el herpes zóster y el sistema nervioso. En los próximos minutos vamos a desmenuzar cómo este virus se infiltra en tus nervios, por qué algunas personas sienten dolor meses después y qué puedes hacer para evitar que la infección dañe tu vida diaria.

¿Qué es el herpes zóster y cómo se relaciona con la varicela?

El herpes zóster es la reactivación del virus varicela‑zóster, el mismo que causa la varicela en la infancia. Después de que la varicela desaparece, el virus no muere; se aloja en los ganglios de la raíz dorsal, una agrupación de cuerpos neuronales que forman parte del sistema nervioso. Allí permanece latente, esperando una oportunidad para despertar.

El camino del virus: de los ganglios a la piel

Cuando el sistema inmunitario se debilita -por edad, estrés, o enfermedades crónicas- el virus se reactiva. Viaja a lo largo del axón del nervio dorsal hasta la piel, siguiendo el patrón de un dermatoma (área cutánea servida por un solo nervio). El resultado son esas clásicas vesículas agrupadas que aparecen en un fruncido de banda en un lado del cuerpo. Pero el daño no se detiene en la superficie: el virus inflama la fibra nerviosa, provocando dolor agudo, hormigueo y, en casos graves, pérdida sensorial.

Dolor que perdura: la neuralgia postherpética

Una de las complicaciones más temidas es la neuralgia postherpética (NPH). Después de que las lesiones cutáneas sanan, los nervios pueden seguir enviando señales de dolor, a veces durante años. Estudios recientes (2023, Universidad de Barcelona) indican que cerca del 15% de los pacientes mayores de 60 años desarrollan NPH de grado moderado a severo. La causa es la desmielinización parcial del nervio y la persistencia de una respuesta inflamatoria que mantiene los canales de sodio hiperactivos.

Imagen del dermatoma en forma de banda con vesículas y ruta nerviosa resaltada.

Factores de riesgo que aumentan el daño nervioso

  • Edad avanzada: el sistema inmunitario pierde eficiencia después de los 50 años.
  • Enfermedades crónicas: diabetes, VIH y cáncer reducen la vigilancia de células T.
  • Tratamientos inmunosupresores: corticoides, quimioterapia o terapias biológicas.
  • Estrés prolongado: eleva cortisol y debilita la respuesta inflamatoria.

Si perteneces a alguno de estos grupos, el riesgo de que el virus cause daño neurológico serio sube considerablemente.

Prevención: vacunas que fortalecen la defensa neuronal

En los últimos años, dos vacunas han demostrado reducir tanto la incidencia del herpes zóster como la gravedad de sus complicaciones nerviosas:

Comparativa de vacunas contra el herpes zóster
Característica Shingrix Zostavax
Tipo de vacuna Subunidad recombinante + adyuvante Virus vivo atenuado
Eficacia (prevención del zóster) ≈90% en >50 años ≈60% en >60 años
Reducción de NPH ≈80% menos casos ≈30% menos casos
Dosis 2 inyecciones a 2‑meses de distancia 1 dosis única
Contraindicaciones Reacciones al adyuvante; no para embarazo No para inmunosuprimidos severos

La evidencia muestra que la vacuna Shingrix no sólo protege contra la aparición del zóster, sino que disminuye notablemente la probabilidad de que el virus dañe los nervios. Si tienes más de 50 años, la recomendación oficial del Ministerio de Sanidad es vacunarte.

Tratamiento temprano: antivirales y control del dolor

El momento en que se inicia el tratamiento es clave. Los antivirales como aciclovir o valaciclovir reducen la replicación viral y limitan la inflamación del nervio. La pauta típica es 7‑10 días de dosis alta, iniciada dentro de las 72 horas desde la aparición de la erupción.

Para el dolor agudo, se usan analgésicos de primera línea (paracetamol, ibuprofeno) y, si el dolor supera los 5/10, se añaden opioides de corta duración o gabapentina. La gabapentina actúa sobre los canales de calcio de la fibra nerviosa, aliviando la neuralgia postherpética en muchos casos.

Escena de prevención y tratamiento: vacunación, antivirales y ejercicio para adultos mayores.

Estrategias de autocuidado y rehabilitación nerviosa

Además de la medicación, hay hábitos que favorecen la recuperación del nervio dañado:

  1. Ejercicio suave: caminar o yoga estimula la circulación y evita la atrofia muscular.
  2. Aplicación de calor local (compresas tibias) alivia el espasmo muscular alrededor del dermátomo afectado.
  3. Técnicas de relajación como respiración diafragmática reducen la percepción del dolor.
  4. Suplementos de vitamina B12 y ácido alfa‑lipoico han mostrado beneficios en la regeneración de la mielina.

Si el dolor persiste más de tres meses, es recomendable consultar a un neuro‑rehabilitador o a un especialista en dolor crónico. Algunas terapias avanzadas, como la estimulación eléctrica transcutánea (TENS) o la infiltración de bloqueos nerviosos, pueden ser opciones.

Preguntas frecuentes

¿El herpes zóster siempre afecta al sistema nervioso?

Sí, el virus siempre se reactivará en un ganglio dorsal y recorrerá el axón hasta la piel, lo que genera inflamación nerviosa. Sin embargo, la intensidad del daño varía según la respuesta inmunitaria.

¿Puedo prevenir la neuralgia postherpética?

La mejor prevención es vacunarse antes de la primera aparición del zóster y, una vez que aparece, iniciar el tratamiento antiviral dentro de las 72 horas. El control temprano del dolor también reduce la probabilidad de NPH.

¿Cuánto tiempo dura el dolor después de que la erupción desaparece?

En la mayoría de los casos, el dolor desaparece en 2‑4 semanas. En aproximadamente el 10‑15% de los pacientes mayores de 60 años, la neuralgia postherpética puede persistir más de 6 meses.

¿Qué diferencia hay entre la vacuna Shingrix y la Zostavax?

Shingrix es una vacuna recombinante con adyuvante que ofrece unos 90 % de eficacia en adultos mayores y reduce significativamente la neuralgia. Zostavax es un virus vivo atenuado con menor eficacia y no se recomienda para inmunosuprimidos.

¿Los niños pueden contagiar herpes zóster?

El herpes zóster es raro en niños porque su sistema inmunitario suele estar fuerte. Cuando ocurre, suele ser menos severo y con menor riesgo de complicaciones nerviosas.

Resumen práctico para cuidar tu nervio

  • Vacúnate con Shingrix a partir de los 50 años.
  • Al primer signo de erupción, acude al médico y pide antivirales.
  • No ignores el dolor: usa analgésicos y consulta si supera los 5/10.
  • Apoya la recuperación con ejercicio, calor local y suplementos de B12.
  • Si el dolor dura más de tres meses, busca un especialista en dolor neuropático.

Entender la interacción entre el virus y tu sistema nervioso te permite anticipar complicaciones y actuar a tiempo. La buena noticia es que, con la prevención adecuada y un tratamiento temprano, puedes minimizar el impacto del herpes zóster y seguir disfrutando de una vida sin dolor crónico.

1 Comentarios

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    Edith Casique

    octubre 22, 2025 AT 18:30

    ¡Esto es una pesadilla! El herpes zóster no es solo una erupción, es una verdadera guerra contra tus nervios, y si no lo tratas a tiempo, el dolor te consumirá.

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